Hace dias que no escribia, no habia tenido tiempo. El Lunes 3 aun estabamos en Hvar, esa noche se suponía que venían fuertes vientos asi que la gente del puerto nos pidió que nos separáramos de Glass Slipper y que cada uno tomara un aboya y nos amarraramos con una cuerda a la orilla. Asi lo hicimos, el problema fue que todos nos querían pegar, porque pasaban con los dinghys a la orilla y se encontrban con nuestras cuerdas , a principio las teníamos bien tirantes, incluso con una boya para que la vieran, al final mejor la soltamos un poco y que se hundiera ,así no se enganchaban en la cuerda. El mismo Lunes como a las 4 y media de la tarde llegaron Eduardo y Ximena a pasar unos días con nosotros. El martes temprano, nos levantamos, tomamos desayudo y como a las 11 entramos al molo a cargar agua, estuvimos hasta casi las 12 y partimos hacia las islas Klements, la idea era ir a a bahía que esta justo al sur de la marina Palmeziana, entramos tiramos ancla pero no agarro nunca, además la bahía estaba repleta de veleros no había mucho espacio para maniobrar, decidimos seguir a la siguiente. Finalmente nos anclamos en la última de las entradas. Las isas Klements, están a sur de la isla Hvar y es una serio de islitas tipo archipiélago con muchas entradas.
Nos anclamos y tiramos 2 lineas a tierra, super bien agarrados. El agua maravillosa, nos bañamos los 4 un monton. En la tarde salimos a caminar y descubrimos el restaurant Paraiso en lo alto de unos de los cerros , muy agradabe , solo tomamos una cervezas, la vista era increíble, se veian todos los barcos de esa bahía.
En la noche tuvimos show. Estaba calmadisimo, y un velero estaba delante nuestro en una boya, como estaba todo en calma el velero flotaba libremente y en un minuto estaba pegado a nosotros, tal cual, nos choco suavemente en la parte delantera de nuestro velero, con Jorge saltamos, subimos a cubierta y ahí estaba este velero, un Bavaria de 36 pies, pegado a nosotros, también despertó Eduardo y llego a ver que había pasado. Lo mas genial es que la gente de Bavaria no se despertó. Recogimos un poco de cadena, para alejarnos de el, nos acercamos mas a la orilla, de manera de despegarnos , el estaba primero asi que nosotros teníamos que maniobrar, nos separamos y en menos de una hora el velero estaba pegado ahora al otro lado nuestro. Claramente su boya tenía mucha cuerda, ahora partieron Jorge y Eduardo en el dinghy, a acortarle la cuerda de la boya. A lado nuestro habían otro velero con gente muy agradable ,uno de ellos estaba durmiendo en cubierta y también se despertó, nso presto su dinghy para que lo pusiéramos en un lado del velero y el nuestro al otro, asi si se acercaba nuevamente al menos no nos chocaba. Estuvimos desde las 3 hasta la 5 de la mañana, durmiendo a saltos afirmando este velero que llegaba a cada rato a nuestro lado. Lo mas genial de todo es que no se enteraron de lo que paso, solo como a las 8 de la mañana que salieron a cubierta (era un matrimonio Ingles con 2 niños) Jorge les conto y no lo podía creer.
Ayer Miercoles fue el cumpleaños de Ximena, en la mañana nos fuimos a caminar para conocer un restaurant que nos recomendaron, Dioniz, hicimos reservas por teléfono, pero no sabíamos donde era, asi que partimos caminando, estaba cerquita, apenas 10 minutos caminando por el cerro, de ahí nos fuimos caminando a la Marina Palmeziana, eran 3,5 kms. Un camino larguísimo, lleno de matorrales y arboles, con Jorge y Ximena nos demoramos como 50 minutos, Eduardo decidió irse por otro lado y el pobre se perdió llego media hora mas tarde y todo rasmillado por arboles, se perdió y se metió por unos cerros sin caminos, estabamos super preocupados, no llegaba nunca, pero llego, un poco arañado y agotado, pero llegó.
En la marina Palmeziana nos encontramos nuevamente con John y Cyndi, nos fuimos a almorzar juntos a celebrar a Ximena, después de almuerzo nos fuimos en Glass Slipper navegando hacia la bahía donde estaba Excalibur. Descansamos en poco y en la noche nos fuimos todos a cenar a Dioniz. Lo pasamos increíble , la comida de todo gusto, deliciosa, estuvimos hasta casi las 12 de la noche, regresamos a los veleros y a descansar hasta el otro día. Al dia siguiente nos fuimos a Brac, la idea era anclar en una de las bahías al sur de la isla, pero no había espacio asi que seguimos hacia Milna. Nos anclamos en una bahía al sur oeste del pueblo, en la tarde todo bien, nos bañamos el agua maravillosa , pero en la tarde empezó el viento norte, en la nariz, además toda la mugre de la bahía llego donde estábamos nosotros, en la noche nuevamente show, nos preocupo acercarnos mucho a tierra asi que tipo 2 de la mañana Jorge y Eduardo tiraron un ancla de respeto , entonces nos fuimos a dormir, con 2 anclas no había forma de movernos.
Hoy en la mañana despertamos mas tarde, por todo el show de anoche, y como a las 10 y media salimos hacia el norte de Brac. A las 2 y media estábamos en el muelle de Povljia, el pueblo de los abuelos de Jorge. Una tremenda emoción porque hace tres años el prometió a sus primos que volvería en su propio velero un dia, y asi es , volvimos nuevamente a Povjlia, es la tercera vez que estamos aquí pero ahora sin apuro, nos quedaremos un par de días, el domingo estamos invitados a almorzr en la casa de su abuelo, que hoy día está viviendo la viuda de un primo de su papa y su hija.
Corre un viento fuertísimo, estábamos en la parte norte del muelle y un pesquero que esta al sur del mismo muelle nos dijo que mejor nos anclaramos al lado de ellos y asi lo hicimos, ahora estamos súper protegidos por el muelle y por el pesquero.
Ok, perdón por perderme tantos días pero ya estamos al día .
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